Parte de la cúpula empresarial debe dejar de hacer la lucha de clases

Durante su participación en las Mesas de Trabajo de la Conferencia Nacional para la Recuperación Económica, Gibrán Ramírez Reyes, Secretario General de la Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS), presentó 6 propuestas concretas de política pública para afrontar la crisis por el COVID-19 en México.

Antes de ponerlas a discusión, Ramírez Reyes hizo un llamado a que una parte de la cúpula empresarial deje de hacer la lucha de clases: “Primero, al afirmar que la única manera de salir adelante es inyectando recursos a empresas que representan un mayor valor del PIB, siendo estas el único mediador posible para proteger el empleo, sin poner su parte en la crisis; en segundo lugar, especulando políticamente con la permanencia de la cabeza del actual gobierno; y en tercer lugar, conteniendo la inversión en un grado sensiblemente mayor al que lo ha hecho la inversión extranjera, por motivos que van más allá del riesgo político real”.

En la mesa titulada Atención Inmediata a la crisis: Macroeconomía y Política, organizada por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y moderada por Héctor Aguilar Camín, enumeró una serie de propuestas de política pública para afrontar la crisis, con la primicia de proteger primero a las personas. “Proteger a las personas es un asunto de derechos, no es un asunto de regalos en efectivo, como decía el gobernador Carlos Mendoza”, agregó el Secretario General del organismo internacional.

  1. Rescatar a las medianas y pequeñas empresas del sector turístico. Se requiere de un plan emergente para conectar la demanda de países que han ido superando la crisis sanitarias, para venderles paquetes a futuro en México, dependiendo del avance del brote.
  2. Cumplimiento de las promesas de los proyectos de inversión, especialmente en materia energética e infraestructura; el empresariado ha dicho que sí pero no ha dicho cuándo; con ello se activarán sectores de gran arrastre.
  3. Reforma fiscal que respete la proporcionalidad y sea contracíclica, replanteando algunas de las tasas impositivas a la baja pero que actualmente no se cobran eficientemente y que se evaden por la forma en que se están planteando. El corazón de esta reforma tendrá que ser la eliminación de excepciones y de instrumentos para la elusión fiscal.
  4. Pasada la crisis, lo principal es proteger a las personas y para ello no solo se trata de reactivación económica, sino de fortalecer la seguridad social, y ello pasa por elevar el programa de adultos mayores por lo menos al valor de la canasta digna de la comisión del salario mínimo, así como transitar hacia un sistema mixto de pensiones.
  5. Generar un esquema de formalización con base en la formulación de regímenes especiales de ciertos sectores de la economía que están en la informalidad.
  6. Acelerar la construcción del INSABI con base en el programa IMSS Bienestar, siendo el esquema que más funciona con población abierta.

En dicha mesa de trabajo participaron también Carlos Salazar, presidente del CCE; Beatriz Paredes Rangel, senadora del PRI; Mario Delgado, diputado de Morena; Idelfonso Guajardo, ex secretario de Economía; Carlos Mendoza Davis, gobernador de Baja California Sur; Juan Carlos Romero Hicks, diputado del PAN, entre otros.

Me dedico al arte y ciencia de la política. El trabajo todo lo vence. Autor de Vida y muerte del populismo (UAS-El Regreso del Bisonte, 2024).